El almuerzo llegando a su fin
reconoce el postre como aviso dulce del futuro.
Las voces cansadas intentan acariciar el sueño del silencio.
El día se baña en tarde,
sórdida, ahogada, calurosa,
las chicharras
parecen entender el ritual
y lanzan el último grito que avisa que por unas horas se
entregarán
al embrujo de la tradición.
Los árboles se doblan en la vereda intentando acariciar la ventana
y perdonando al viento que un tiempo atrás los desafió,
y sin hacer mucho ruido, intentan llamarlo sin éxito.
El verano implacable se jacta de su poderío.
Por lo lejos se filtra el llanto de un niño,
obligado por los espíritu de sus ancestros
a ejecutar las ordenes oníricas de la matiné,
de golpe el silencio empieza a corroer las almas
que no prepararon la partida,
las imágenes giran arremolinadamente sobre
el silencio que te lastima la piel
y el mundo se transforma inexorablemente en siesta.
Muy bueno, me he paseado un poco por tu sitio... muy interesante, me gusta lo que he leído.... y la música... me quedé un poco más...buena elección... Saludos!
ResponderEliminarmuchas gracias, te espero cuando quieras, me alegra que te guste, besos
ResponderEliminarQue bonita haces tu hasta la siesta... Algo tan sencillo y a lo que tu vistes de fiesta con tus palabras.Como siempre... agarrada a tus letras.Bss
ResponderEliminarmuchas gracias, por estar siempre, besos
EliminarMuy buen texto, Rubén. Saludos desde México...
ResponderEliminarmuchas gracias, un abrazo
EliminarUn placer leerte. Un abrazo
ResponderEliminarEl placer es mío, y mi agradecimiento, besos
Eliminarhola soy sil...me gusta mucho lo que escribis, soy agena al conocimiento de lo que escribis..pero me encanta..te visitare para leer maravillas q emocionan...a veces no entiendo..por q no estoy al tanto de poesias y poemas no se comparar pero aprendere para entender besos..
ResponderEliminarMuchas gracias por tus palabras, te espero cuando quieras,
Eliminary si es por no entender no te hagas problemas yo tampoco entiendo jaja, besos