y es gris
y es frío,
las ganas de Dios lloran en la calle
y es triste
y dan ganas de correr
y el cielo te acaricia y te arropa de nubes grises,
las tardes de Dios se ven por las ventanas
algunas entornadas
otras hechas calor en los mates compartidos,
la noche del apuro sale casi desnuda a la calle
adentro dios es de un color cálido
acá afuera corta el gris de los ojos de dios
y es la llovizna
y es la melancolía
que va a parar a un montón de hojas que dejó el barrendero
olvidadas y llenas de adiós, muriéndose de a poco
en la esquina de casa.
Temendamente emotivo. Comparto en twitter.
ResponderEliminarMuchas gracias Teresa y gracias por compartirlo, muy amable, un abrazo.
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