muerta, cayó muerta.
El surco oyó la bala y
sospechó compañía
negra, la mujer era negra.
Dios hizo el ·último
intento por lavar sus culpas
fría, el agua era fría.
La tierra hedía un
rojo y acallado temor
silenciosa, la muerte siempre es silenciosa.
La lluvia se dividía
entre odiar la sangre o amar el cadáver
ingrata, demasiado ingrata.
Lentamente el barro
fue dejándola sin manos
pecaminosas, endiabladamente pecaminosas.
Un cuervo vanidoso se
pinto los labios en su herida
opaca, la sangre ya era opaca.
La morbosidad de la
noche corola el espanto.
negra, fría, silenciosa
ingrata, pecaminosa, opaca
Su muerte no pudo definir mejor su vida.